sábado, 18 de junio de 2011

Para comunicar, para poner límites ¿qué educación doy?

Ya hemos visto los cambios físicos, emocionales, racionales y sociales del adolescente... ¿cómo afrontarlo del mejor modo posible? ¿cómo educar sin ser permisivo, sin ser autoritaria? Aquí pues, analizaremos cómo!
Esta claro que no hay un sólo modelo, ni una varita mágica que te diga que hay que hacer y cómo actuar en cada momento...

Sin embargo, si que existen distintos patrones mediante los cuales podemos actuar. Y todos ellos se enmarcan dentro de un estilo educativo que, los psicólogos, solemos llamar democrático. Fue Diana Baumrind quien clasificó los tres primeros estilos: autoritario, permisivo y democrático, en función del grado de control y supervisión que ejercían sobre la conducta de sus hijos e hijas y grado del cariño y afecto que les demostraban. Y más tarde otros autores agregaron el patrón de negligente o indiferente.

Tal y como expresan investigadores de la Universidad de Sevilla en su programa para padres de adolescentes,las hijas e hijos de progenitores democráticos presentan niveles más altos de autoestima y de desarrollo moral, manifiestan un mayor interés hacia la escuela, un mejor rendimiento académico y una mayor motivación, consumen con menor frecuencia alcohol y otras drogas, son menos influenciables por el grupo de iguales, y presentan menos problemas de conducta en general. Por el contrario, adolescentes que han crecido en un estilo indiferente tienden a presentar toda una gama de problemas académicos, emocionales y conductuales, debido por un lado a que han carecido de un ambiente cálido y afectuoso, y por otro, a que no han tenido ningún tipo de guía ni control para su comportamiento. En niveles intermedios aparecen los adolescentes hijos e hijas de progenitores autoritarios y permisivos.















Así, desde el estilo democrático sería fundamental el afecto y la valoración al adolescente, la comunicación, los límites y por supuesto, el fomento de la autonomía. Este último punto me gustaría explicarlo más detalladamente, puesto que quizás quede un poco a la deriva tras las últimas entradas. Cuando hablamos de autonomía, nos referimos a potenciar su independencia y adultez. Algo, que por cierto, hoy día cuesta mucho por muchos padres, ya que les gustaría ser eternamente esa figura que necesita su hijo "dependiente", esa figura de protección, que sin duda con la autonomía seguirán siendo, pero a otro nivel.

La preocupación y ansiedad que los padres y las madres sienten ante la posibilidad de que sus hijas e hijos se equivoquen es totalmente comprensible, lo que no lo es tanto es que esta preocupación impida el crecimiento autónomo de los y las jóvenes y llegue a dificultar su bienestar psicológico.

Pero, tal y como os estaréis planteando, todo esto es muy abstracto y poco práctico. Es por ello que os sugiero la siguiente actividad:


- Anotad en un papel entre vosotros (a ser posible esta actividad es mucho mejor hacerla con varios o entre varios padres y madres que tengáis niños de edades similares) las últimas situaciones en las que tuvierais un conflicto o pelea con vuestro hijo o hija.

- Una vez anotada, anotad en papelitos los protagonistas y un narrador. (Ejemplo: padre, madre, hija, narrador) Y repartidlos entre vosotros (en caso de que sobren padres, mucho mejor; seréis observadores)

- El narrador pone en situación una vez se ha leído el conflicto, y cada uno actuará en función de sus intereses tratando de negociar/o no en función de su papel. (Es importante que cada uno en su papel actúe del modo en el que lo haría en su vida real).

- Una vez finaliza la historia: debate. Si ha habido observadores mucho mejor. En caso de que no los haya habido el propio narrador puede ayudar como observador diciendo lo que ha visto objetivamente.

- Ahora los protagonistas contestan:
  • ¿Cómo me he sentido?
  • ¿Cómo podría mejorar la situación?
  • ¿Ha habido diálogo? y en la vida real ¿existe diálogo?
  • ¿Qué podría sacar de esta experiencia para llevarlo a casa?

No hay comentarios:

Publicar un comentario